Durante la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medioambiente y el Desarrollo que se llevó a cabo en la ciudad de Río de Janeiro en 1992 (denominada Eco-92 o Río-92), a partir de una propuesta de Canadá, nació la idea de instituir el día 08 de junio como el Día Mundial del Océano, fecha conmemorativa que sólo se volvió oficial por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 2008 (Resolución 63/111, párrafo 171).
Pero ¿por qué celebrar el Día Mundial del Océano?
El Océano nos aporta más de la mitad del oxígeno que respiramos. A cada dos respiraciones que damos, una proviene del Océano, que absorbe una parte significativa del CO2 que producimos, y casi la totalidad del exceso de calor provocado por el aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero. Esto quiere decir que, sin un Océano saludable, nuestro futuro se ve gravemente comprometido.
Por eso, es fundamental que desarrollemos e implementemos, efectivamente, medidas que nos permitan combatir los cambios climáticos, y atenuar sus impactos.
Cuanto más tardemos en actuar, más nos va a costar revertir los daños que ya se han causado. Observemos, por ejemplo, el impacto que el aumento del nivel del mar ya presenta, hoy en día, en muchos países costeros e insulares, poniendo en riesgo la vida de millones de personas.
Además, vale recordar que el Océano es fuente de alimentos, de minerales, de medicamentos, y que abriga la mayor diversidad de vida y de ecosistemas.
El Océano provee alimentos y condiciones de vida para más de 3.000 millones de personas. Según el Banco Mundial, la economía azul, vinculada al océano, acarrea una riqueza equivalente a 3 billones de dólares al año. El Océano podría clasificarse, en términos económicos, como la 5ª economía del mundo. ¡Y eso que sólo conocemos 20 % del Océano!
En la 28a Conferencia Scout Interamericana, se aprobó la Resolución 11/2022, que convoca al Movimiento Scout a participar activamente en la Década del Océano (las Naciones Unidas proclamó la década de 2021 a 2030 como la Década del Océano – Resolución A/RES/72/73, del 05.12.2017 – se puede acceder a la Resolución 11/2022 en https://escotismoazul.org/wp-content/uploads/2023/01/ConfIAR-Doc11-Resoluciones-ES.pdf ).
La 28a. Conferencia Scout Interamericana tuvo lugar en Ciudad del Este, Paraguay, justo a orillas del Río Paraná. Hay simbolismo importante en el hecho de que la Resolución 11/2022 haya sido aprobada en Ciudad del Este: hace falta que todos, incluso quienes no viven en países o ciudades litorales, comprendan el papel de la cultura oceánica y la importancia de participar activamente en este tema. La protección del Océano tiene una relación directa con la protección de los ríos y de sus afluentes (una curiosidad: en la lengua tupí-guaraní, Paraná significa “semejante al mar”).
En resumen, el Océano es esencial para la vida en el Planeta que, como ya decía el escritor Arthur C. Clarke, se ha llamado Tierra equivocadamente, ya que el Océano cubre el 70% de su superficie. Conocer (y entender) la influencia del Océano en nosotros, y nuestra influencia en el Océano, es crucial para que vivamos de manera responsable y sostenible.
¡Salve el Océano! ¡Salve el Día Mundial del Océano!
